Una
sentencia invalida varios artículos de la Orden de Hacienda que establecía
dicha obligatoriedad.
El Tribunal Supremo ha anulado la obligación de que los trabajadores
autónomos tengan que declarar el IRPF de forma telemática.
En el fallo emitido por el Supremo, ha declarado inválidos varios
artículos de la Orden de Hacienda que establecían la obligatoriedad general de
presentar la declaración del IRPF a través de medios electrónicos. En dicho fallo,
según recoge Espacio Pymes, no se han especificado las condiciones que
justifican dicha imposición.
La sentencia enfatiza que la normativa no puede imponer el uso
exclusivo de medios electrónicos a los ciudadanos, sino que estos deben tener
el derecho de elegir cómo desean relacionarse con la Administración.
Además de eso, la orden de Hacienda que se anuló también eliminaba la
opción de obtener la declaración y sus documentos en papel mediante el Servicio
de tramitación del borrador o de la declaración de la Agencia Estatal de
Administración Tributaria. En lugar de eso, establecía como obligatorio
presentar la declaración solo por medio electrónicos.
Los expertos recuerdan que la Ley General Tributaria reconoce el
derecho de los ciudadanos a comunicarse electrónicamente con la Administración,
pero no establece la obligatoriedad de hacerlo.
Promover y
facilitar el uso de medios electrónicos
En ese sentido, la sentencia emitida por el Tribunal Supremo recuerda
que la normativa no permite que el Ministro de Hacienda imponga de manera
general una obligación que contradiga este derecho reconocido por la ley.
La sentencia subraya que, aunque la Administración tiene la
responsabilidad de fomentar el uso de medios electrónicos, informáticos y
telemáticos para comunicarse con los ciudadanos, no puede imponer su
utilización de manera obligatoria. Es decir, la Administración puede promover y
facilitar el uso de estos medios, pero no puede obligar a los contribuyentes a
emplearlos.
Con esta decisión, el Tribunal Supremo ha revocado la decisión previa
de la Audiencia Nacional, la cual no había dado la razón a la Asociación de
Asesores Fiscales en cuanto a la anulación de la obligatoriedad de presentar la
declaración del IRPF por medios electrónicos. Esta decisión sienta un
precedente sobre la interpretación de la Ley General Tributaria.
FUENTE: CINCO DÍAS
